martes, 31 de julio de 2012

MINIMALISMOS XXIX


Jugar con media baraja marcada, guardarse ases bajo la manga, cuando no hay necesidad, puede dar una aparente ventaja, pero en las relaciones personales estas maniobras no sirven para nada, sólo terminan con ellas.


Melody Gardot - If the stars were mine

lunes, 30 de julio de 2012

COSAS ABSURDAS (I)

 

En las últimas semanas, día sí y día también, revuelvo los armarios buscando unas gafas que perdí hace ya algún tiempo. Unas gafas estupendas que me sentaban tremendamente bien y que un día, de la noche a la mañana, desaparecieron dejándome colgada de la desazón que me produce saber que en casa existe un agujero negro por el que se cuelan las cosas más inverosímiles, desde las más intrascendente, a las más valiosas. De todas ellas son dos las que me obsesionan. Una, las gafas; la otra, innombrable, espero que sólo ande escondida, jugando al ratón y al gato para cuando menos lo espere aparecer de nuevo y que mi vanidad crezca unos cuantos enteros antes de que me muera.

Las noches se han transformado en un trasiego de objetos inanimados que parecen burlarse silenciosamente de esta obsesión por encontrar un par de gafas trasnochadas. Pero no puedo evitarlo, o no quiero hacerlo.

Vacío el cajón de la ropa interior y entre el ingente algodón, el tacto de la seda me consuela pensando que el otoño volverá. Miro entre las bufandas, en los bolsillos de las chaquetas de invierno y las manos, acaloradas por un julio estúpido, alcanzan la temperatura de la fusión del plomo. Y sigo buscando en la bolsa de las medias, bajo el canapé, en los bolsos que cuelgan detrás de la puerta, en el carrito del baño, entre los esmaltes de las uñas, sin suerte.

Y en este peregrinar entre objetos cotidianos al final lo que menos importa es si las gafas, que sustituí la misma semana que aquellas otras desaparecieron, aparecen o no porque lo que busco en realidad es ese momento que yo perdí creyendo estar donde debía y que otro utilizó para desvanecerse y convertirse en humo.

No pierdo la esperanza, seguro que andan por aquí, es cuestión de paciencia, seguir buscando y sé que cuando las encuentre lo veré todo más claro, hasta lo de ese tiempo perdido.


Angus & Julia Stone - All of me

sábado, 28 de julio de 2012

AND A LITTLE MINGITATION O ESA CRISIS SIN FIN

 
Siempre me han gustado los programas sobre animales salvajes y soy de las que celebra con aplausos  desmesurados cuando puedo acceder a los videos de National Geographic para ver copular a los marsupiales, a las ballenas cantar a la luna y esas cosas. Sin embargo, tengo especial aversión a esos programas que, como una réplica de un mal Tarzán, sacan un tipo con sombrero que se dedica a perseguir a los bichos y nos muestran lo machote que es en la jungla etc.

Así que con motivo de esta afición a la que he hecho mención durante el vermut, una de las personas con las que compartía aceitunas y ganchitos ha explicado que esos programas de exploradores (de pichirrí),  están infravalorados, que atender a los mismos, y memorizar algunas de las cosas que se cuentan, nos puede salvar la vida. Levanto la ceja, miro a mí alrededor y en plena Rambla del Raval de Barcelona no veo selva, ni desierto en el que aplicar ese truco que tiene que salvarme de un apuro y que el devorador de almendras que ocupa la silla contigua, explica como si fuera el mismísimo Tarzán.  Al parecer, cuando no tenga agua ni líquido elemento potable con el que regar este cuerpecito que se va a comer la tierra, puedo beberme mi propia orina hasta en tres ocasiones y así, como el que no quiere la cosa, largarme un lingotazo de pis que me salvará la vida.

Desconozco las virtualidades de un buen pipí pero me alegra saberlo, nunca se sabe y una con la edad tiene importantes ataques mingitorios que asaltan en cualquier momento y lugar que puede que no vuelva a menospreciar.

No es noticia si digo que lo de las terracitas en verano se empiezan a poner fatal y que por un aperitivo de pobre (nada de cigalitas, ni tristes calamares a la romana), el hachazo es impresionante. Así que, visto lo visto, mientras nos traían la cuenta del dispendio de hoy, he quedado con el devorador de cacauetes y almendras saladas que la próxima vez, o paga él, o ya le veo pidiendo un par de vasos y unas patatas chips, que el pis ya lo pongo yo. Salvaremos la crisis, el ecosistema y convertiremos a Frank de la Jungla en un innovador culinario.


louis armstrong - - Sweet Lorraine.

 

jueves, 26 de julio de 2012

SOLO QUISE QUERERTE Y QUE SUPIERAS PORQUÉ NO FUE



He conocido el lado oscuro de la vida por voluntad, por necesidad, por obligación y he descubierto que al final la vida es como una moneda con dos caras y un canto.

Disecciono la realidad intentando alejarme de los histerismos propios de los excesos de un optimismo desmedido, de un pesimismo fatal. Sobre el canto, manteniendo un difícil equilibrio que peligra por la propia inercia de la moneda al girar, intento sostenerme.   

Girar sin enloquecer. Girar para comprender. Girar para no rebasar el límite de la miseria humana. Girar para que me comprendas. Girar para sobrevivir. 

************************

“Cuando el hombre va en busca del sacerdote, llega empujado por el arrepentimiento, por el remordimiento, por creencias que lo vuelven interesante, que lo engrandecen y consuelan el alma del mediador, cuya tarea no está exenta de una especie de disfrute: purifica, repara y reconcilia. Pero nosotros los Procuradores vemos repetirse los mismos sentimientos malvados, nada los enmienda, nuestros despachos son cloacas que es imposible purgar. ¡De cuántas cosas no me habré enterado al desempeñar mi cargo! He visto morir a un padre en un desván, sin blanca ¡abandonado por sus hijas a las que había dado cuarenta mil libras de renta! He visto quemar testamentos; he visto a madres despojar a sus hijos, a maridos robar a sus mujeres, a mujeres matar a sus maridos valiéndose del amor que les inspiraban para volverlos locos o imbéciles e irse a vivir en paz con su amante. He visto a mujeres inculcar al hijo de un primer lecho aficiones que le ocasionarían la muerte, para enriquecer al hijo del amor. No puedo decirle todo cuanto he visto, porque he visto crímenes contra los cuales la justicia es impotente. En fin, todos los horrores que los novelistas creen inventar están siempre por debajo de la verdad. Va usted a conocer todas esas lindezas; yo me marcho a vivir al campo con mi mujer, París me produce horror”.
-El coronel Chabert-




miércoles, 25 de julio de 2012

AL GUANO



Si escribo que llevo los auriculares puestos, que son de un color rojo intenso y que posiblemente me quede sorda escuchando a Freddie Mercury, alguien pensara que está frente a una tipa absolutamente hortera. No seré yo quien diga que no pero la gran verdad es que cada vez me importa menos lo que piensen los demás. 

Y ahora tengo que dejarles, empieza a sonar “A kind of magic” y tengo que dar unas cuantas voces mientras muevo la escoba a modo de micrófono sideral.

Salud.

P.D. ¿Qué no mola? Pues tú te lo pierdes.

***************************


Ya no estoy en mi mejor momento para practicar
el oficio de los versos.
Se me da mucho mejor
estar en el cuarto ropero con Sara.
Pero incluso en este mundo alternativo
tampoco estoy ya en mi mejor momento.
Necesito
la compasión de mi propia atención.
Quién podría haber adivinado
que el corazón envejece
del contacto con otros.
Leonard Cohen

martes, 17 de julio de 2012

MI HIGO Y YO


Llevo toda la tarde pensando en los támpax. Sí. Las mujeres tenemos esas cosas, menstruamos, contamos y tachamos en el calendario y un día, mientras miramos por la ventana del autobús a esa muchacha de imponentes pechos turgentes que se le escapan del top, nos ponemos a pensar en los tampones, las compresas e incluso en las suaves toallitas íntimas y geles vaginales. 
No es una asociación de ideas concreta, es simplemente casual, pues ese pensamiento relativo a los productos de higiene femenina puede darse mientras contemplas extasiada las obras de la M40, pulsas en el teclado del cajero tu número secreto para pagar el recibo de la luz. Da igual, el poder de la celulosa es así de insistente.

Sin embargo, este pensamiento recurrente hacía esos honrosos y livianos instrumentos vaginales aparecen cuando termino de rellenar el impreso de mi declaración trimestral de IVA. Sí, he recordado que con las nuevas medidas y recortes económicos introducidos por nuestro bien amado Gobierno, mi tesoro, ese que guardo entre las piernas, es un verdadero artículo de lujo. El incremento del IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) que van a sufrir los tampones, entre otras cosas, a partir del 1 de septiembre, así lo atestigua. No es que antes no lo fuera, pues para mí siempre fue un regalo de Dios que grandezas me ha otorgado, pero ahora, en estos momentos, mi hacienda sexual y el de todas mis compañeras ya tiene la pública y legal consideración de delicado y exquisito bien que necesita abastecerse de productos de lujo.

Así que amigas alegraros, el 21 por ciento del IVA para los tampones y compresas son un merecido reconocimiento gubernamental que pone de manifiesto que tenéis un higo que vale un imperio.

domingo, 15 de julio de 2012

MILK TOOTH



Se compró un cepillo de dientes eléctrico y durante horas su única ocupación fue cepillárselos de un modo compulsivo. Abría la boca simulando un gesto fiero, escondía el cabezal en el interior de la mejilla convirtiéndose en una especie de hámster. Cuando las encías empezaron a sangrar y perdieron toda sensibilidad, decidió que ya era hora de abandonar el cuarto de baño que se había transformado en un refugio antiatómico.

Hizo gárgaras con una botella de vodka mientras leía a Henry James. Consiguió adormecer las encías y el recuerdo de su ausencia. 

Se sentó en el filo de la bañera, sosteniendo el libro entre las piernas, marcando con el dedo meñique aquel párrafo que le determinó y esperó, sin éxito, que se le cayeran los dientes.

*************

“Que esa relación propicia había existido de verdad, había continuado durante dos o tres semanas, quedó suficientemente probado por el desconsuelo con que el periodista, por alguna razón, y a partir de cierta noche, se dio cuenta de que había empezado a echarla de menos”.

Katie Melua - Shy Boy

sábado, 14 de julio de 2012

¡OH, YEAH!



Cuando le dije que le quería me miró y sin mover los labios pronunció un sonoro "Oh! Yeah"

****************************
 
The Encounter
 All the while they were talking the new morality
Her eyes explored me.
And when I rose to go
Her fingers were like the tissue
Of a Japanese paper napkin.
 
El Encuentro
Mientras estuvieron hablando de la nueva moral.Sus ojos me exploraban.Y cuando me levanté para irme.Sus dedos fueron como el tissue de una servilleta de papel japonés.

jueves, 12 de julio de 2012

SUZETTE


"Es la historia de un amor como no hay otro igual"

Se pelean artificialmente porque él dice que son 100 gramos por cada 3 huevos y ella dice que no. Le lanza un puñado de harina y su suéter inmortal se tizna de blanco. Una mancha más no le restará empaque a ese glorioso jersey heredero de miles de feroces contiendas frente a un papel en blanco; frente a un espejo que le devuelve más viejo. Con un movimiento de cadera la desplaza y alzando una espátula de madera como si fuera el mismísimo Merlín, clama por la verdadera cuisine, nada nouvelle, sólo cuisine.

Apuran una copa de suave borgoña mientras colocan sobre la mesa los dos únicos platos que comparten y unas servilletas de papel con un curioso estampado.

Su casa que no es suya. La de ella que tampoco es la de él, pero las horas previas a un anochecer manso son de ambos, igual que la templada botella de Côtes de Nuits que se conserva a la sombra en el alfeizar de la ventana, que las deliciosas crêpes suzette que les achisparán los cinco sentidos, y que la enmarañada corrección de su próximo éxito que ninguno de los dos verá.

  *******************************

Crêpes Suzette (Ingredientes para cuatro personas)

• Para la masa de crêpes: 250 ml. de leche, 125 gr. de harina, 50 gr. de azúcar, dos huevos, una pizca de sal.
• Para la salsa: 100 gr. de mantequilla, 70 gr de azúcar, el zumo de dos naranjas (200 ml.), un vaso de licor Triple Seco (100 ml.)

Batimos los ingredientes de la masa de crêpes hasta que quede una mezcla homogénea. Calentamos una sartén especial para crêpes y la pincelamos con un trocito de mantequilla. Vertemos sobre ella una porción de la mezcla hasta que cubra el fondo, para ello la moveremos con el fin de que la mezcla se reparta, formando una capa delgada. Tras un par de minutos, damos la vuelta con una espátula, dejamos que se haga durante un minuto por el otro lado y reservamos. Procedemos de igual manera hasta tener todos los crêpes hechos, y los doblamos por la mitad dos veces.

En una sartén, dejamos que se derrita la mantequilla junto con el azúcar. Añadimos el zumo de naranja y dejamos que cueza unos minutos para que se espese un poco. Colocamos los crêpes sobre la salsa y dejamos que tomen calor durante un minuto. Rociamos con el vaso de licor y flambeamos. Servimos de inmediato.




domingo, 8 de julio de 2012

A ESTE LADO DEL PARAISO



Balanceo el pie mientras monopoliza una conversación con la que me envuelve. No hay ni un gramo de afectación, ni de falso encantamiento aunque sus dedos jueguen con los míos en varias ocasiones, aunque su mano, excesivamente tibia, rodee mi cuello y de un modo firme lo acaricie aliviando la tensión que arrastro.

No son gestos de seducción que no caben, ni falta que hacen. Lo sabe y lo sé. No existe tensión sexual no resuelta, la resolvimos en su momento, y desde entonces nuestro sexo se compone de compartir un lenguaje común y un modo de hacer tan similar que no es necesario explicar algunas cosas.

No sé cuantas horas hace que nos sentamos frente al mar pero deben ser muchas porque, sin darnos cuenta, pasó de un inmenso aguamarina, a un intenso cian. La gama de azules es inabarcable, casi tanto como tú. 

Tiene que viajar y yo que volver a casa. Dos horas de trayecto por una vía rápida, monótona que me permite pensar en el preciso instante en que nos dimos cuenta que algunas cosas estaban más allá del sabor salado de la piel y de la necesidad de compartir una cotidianeidad abrumadora y desconcertante, incomprensible e irreconciliable con algunas realidades mundanas.

Bebemos agua mineral y el mar, que viaja paralelo con nuestro regreso, se oscurece y desaparece confundido con la línea de un horizonte que se apaga al llegar la media noche. 

******************************
"Él que sobre todas las cosas amaba la muerte, amó y vivió con deliberada y pervertida curiosidad, tal y como ama un enamorado que deliberadamente se reprime ante el prodigioso cuerpo complaciente, dispuesto y tierno de su amada, hasta que no puede soportarlo y entonces se lanza, se arroja, renunciando a todo, ahogándose".


Charlie Hunter & Norah Jones - More than this

jueves, 5 de julio de 2012

TUT-TUT-TUT


¿Qué es lo más importante que llevas en el bolso? Se lo pregunta mientras hablan entre sonrisas poco disimuladas, y ella contesta que no lleva nada importante. Lo sacude levemente y en su interior resuenan un par de juegos de llaves, un tarjetero, unas monedas y una diminuta agenda de papel. 

Y tú -pregunta ella- ¿Qué es lo más importante que llevas en el bolsillo de tu americana? Él, entre risas quedas, mueve la cabeza y contesta que nada. Con la mano revuelve unas llaves, un encendedor y una cartera. No tiene nada importante en el bolsillo.

Se despiden, tienen que colgar. Mientras camina con paso ligero, desliza la mano dejando caer el teléfono hasta el fondo de su bolso. A cientos de kilómetros, él lo guarda en el bolsillo interior de su chaqueta. 

La respuesta a la pregunta doblemente formulada era sencilla, lo más importante que ella lleva en su bolso, es lo mismo que él guarda en el bolsillo. Su cordón umbilical

jason marz - i´m yours

miércoles, 4 de julio de 2012

ESTADO DE ENAJENACIÓN MENTAL TRANSITORIA

Por distintos motivos, tengo unos días con el cerebro a medio gas. Lleno la papelera de reciclaje hasta arriba pero algo me dice que lo deje ahí, puede que en algún tiempo, tras reposarlo, corregirlo, pueda salvarse de la quema. 

Así que para paliar el mal que me aqueja voy a hacer uso de la mala costumbre de tirar de textos antiguos, de volver a los minimalismos y esas cosas con las que me sustituyo cuando no estoy presente. 

Sin embargo, me veo en la obligación de avisar que este disloque mío puede disloquearse mañana mismo, porque mis vacuidades nunca se sabe lo que pueden durar.

Pero por si acaso, por aquello de que nunca sabremos lo que puede durar, aquí dejo la recuperación, no camuflada del día que, porque no decirlo, me viene muy al pelo.


lunes, 2 de julio de 2012

ESOS PAISAJES


Me paro frente a la persiana y leo, con poca sorpresa, que Pascual ha fallecido. Se veía venir. En las últimas semanas, han sido pocos, muy pocos, los días que se le vió. No estaba bien, algunas cosas no perdonan.

Se jubiló hace ya algunos años pero aún así, día sí y día también, bajaba para atender a sus clientes porque, como él mismo decía: de la vida uno no se jubila nunca, sólo se muere; aunque fueran otros quienes sirvieran los cafés, los quintos y los pinchos de tortilla.

Y su vida era una barra de aluminio, unas mesas siempre llenas, una terraza en la que uno podía tomarse los mejores boquerones en vinagre en kilómetros a la redonda y unas tertulias a las que sumarse aunque sólo se quisiera escuchar y poco más.

Es ley de vida y no caben trampas al destino. Sin embargo, pese a todo, las mesas continuarán llenas, los boquerones, los pinchos de tortilla y los cafés expresos se servirán igual. Sus hijos, desde hace años, están al frente del negocio, en eso, la rutina cambia poco. Pero, aún así, ese espíritu de “Casa de comidas”, donde nos reuníamos los vecinos de siempre, desaparecerá poco a poco, estoy segura de eso.

Los paisajes de las ciudades y los nuestros cambian así, de un modo casi imperceptible, silencioso. 

*********** 
"El hombre, ¿Dios lo bendiga!, que me bendió todos mis libros murió hace pocos meses. Y el dueño de la tienda, el Señor Marks, ha muerto también. Pero Marks&CO. sigue allí todavía. Si por casualidad pasas por el 84 de Charing Cross Road, ¿Querrás depositar un beso en mi nombre? ¡Le debo tantísimo...!"