lunes, 1 de febrero de 2010

CUCHARILLAS


Están tan cansados que sueltan los maletines junto a la puerta, sin cuidado alguno.
Se tumban sobre la cama. Los zapatos a los pies, los abrigos aún puestos y el sueño que les vence. Derrumbados, de costado, muy juntos. La espalda contra el pecho, acoplados como dos cucharillas en un cajón cualquiera y un abrazo a la altura de la cintura que los encadena una vez más.
La conversación eterna:
-¿Me quieres?
-Te quiero un mundo
-Por eso no nos acostaremos, ¿verdad?
-Claro, por eso.
-Entonces mejor nos dormimos ¿no?
-Sí.
-Vale, pero mientras me duermo no dejes de decirme cuanto me quieres.

Elis Regina - aguas de marco

7 comentarios:

  1. Alguien me ha hablado de este blog. A alguien le estoy agradecido.
    Te he leído con efecto retroactivo. He disfrutado algunos de tus textos veteranos y, la verdad, no sabía en cuál dejarte el comentario.
    Opté por el primero por aquello del orden.

    Lo que no entiendo es por qué la gente no te comenta más.

    Querré volver.

    Te sigo.

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  2. Muchas gracias.
    Aquí estaremos, hasta que nos echen.

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  3. Me encantó Anita! Acá se dice "cucharita" y es lo mejor... aunque "mejor nos dormimos" es casi imposible, pero si es tierno!!
    besosss

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  4. Gracia Paula Maria. Dormirse así en "cucharita" es una maravilla.

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  5. Incluso estando cansados deberían hacer el amor.

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