martes, 4 de septiembre de 2012

CIAN STORM



Mi vida modifica la tuya, la tuya modifica la suya, que la modifica quien ni tú ni yo vemos, modificando, a su vez, la nuestra. Y en ese modificar constante, tú con tu complejidad y  yo con la mía, nos volvemos cada vez más complicados, multiplicando por cien mil la distancia que nos separa, y que me empuja a olvidarte, a que me olvides.

 ****************

“Teresa sentía que nunca había amado más a Robert; y se sentía amada también, más inquebrantable aún que antes, como si, pensaba, los problemas trajeran consigo esa proximidad. ¿O había pánico?, se preguntaba en otros momentos; ¿era con pánico como se sondean las profundidades de la confianza? ¿Era con pánico como el viudo y la repudiada protegían lo que habían sido incapaces de proteger antes? ¿Desconocía las respuestas. Pero no le parecía bien que la obstinación de una niña frustrara lo que tanto merecían”.
Los niños 
-William Trevor-


 

6 comentarios:

  1. Complejos son los egos...Tal vez esos dos pares de ojos sean capaces, algún día, de verse con la mirada simple de la sabiduría.
    Força i petó. ;)

    ResponderEliminar
  2. ¿Complicación, modificación o simplemente identificación, Anita?
    Un beso :)

    ResponderEliminar
  3. Pues no lo se MdlMar. ¿Tú qué crees?
    :)

    ResponderEliminar
  4. No sé. En una pequeña proporción puede ser cierto. Por el contrario, aunque no sea afín con lo que has escrito, yo no me creo que unas alas de mariposa que aletean en en los mares del sur, puedan ocasionar un ciclón en los mares del norte.

    ResponderEliminar