Mezclar lo tuyo con lo mío y que al final lo que resulte sea tan aburrido que no quede otra opción que lanzarlo a la hoguera o guardarlo en un cajón para que el polvo y las polillas acaben con ello.
"Hay mucha poesía en los abandonos, vuelves a pensar mientras escuchas el hondo rumor guerrero del Pacífico. Y recuerdas unos versos de Philips Larkin, donde puede leerse que en el fondo detestemos nuestras habitaciones, con sus trastos especialmente elegidos por nosotros, con esa leve bondad de los libros y la felicidad de la almohada propia y nuestra vida tan perfectamente en orden."
-El mal de Montano-
Los buenos polvos siempre se mezclan, si no, de qué.
ResponderEliminarAhí, ahí:
EliminarLos caminos pueden ser polvorientos, es cierto, mas lo bueno es que son de ida y vuelta.
ResponderEliminarGran verdad.
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