"No te quepa la menor duda, estoy contigo. Siempre estaré contigo, junto a ti. Confía en mí. Sabes que te quiero y jamás te haría daño, puedes estar segura. Nada puede quebrarnos. Te quiero".
Pronuncia estas palabras mientras cierra la maleta. Dentro, un par de camisas, una muda, unos vaqueros y poca cosa más. No necesita llevarse gran cosa. En un par de días estaré de vuelta, sólo es trabajo, pero no se puede demorar.
Llegó el martes pero ya se sabe, su trabajo le exige estar permanentemente localizado. En cuanto termine, volverá. Un par de días, es lo que le ha dicho. Tal vez le coja el fin de semana por medio, si se le complica, pero le ha dicho que no se preocupe, al siguiente recuperaran el tiempo perdido. Sólo tiene que esperar que las manecillas del reloj giren muy rápido. Un beso en la puerta y el abrazo de ella, como si fuera el último, no puede evitarlo, siempre lo mismo, no sabe porqué motivo, cree que no va a volver.
Baja por la escalera rápido, salta los escalones de dos en dos, la bolsa golpea de manera intermitentemente la barandilla. Antes de llegar al portal, ya ha conseguido marcar el número y dejar un mensaje: Cariño, voy camino del aeropuerto, en dos horas estoy en casa. Ponte guapa salimos a cenar.
rachel yamagata -
Dedicated to CGM
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