Una pelota como la de la foto la tenía yo pequeño, y le sacaba mucho provecho. Me ha hecho gracia la foto. Lo de estrellarse en el fronton más de una vez, es ley de vida, y cosa de los reflejos condicionados, que al final no nos enseñan nada, y es que no aprendemos nunca. Abrazo y chucho.
Es cierto, no aprendemos nunca y la pared es demasiado dura. Al nacer deberían colocarnos esas alarmas que ahora llevan los coches para que cuando aparcas no te lleves los obstáculos por delante. Lo del chucho lo había entendido. En mi tierra un "chucho" es un dulce, consistente en un cono de pasta relleno de crema y bañado por encima de azucar. No es un beso pero también reconforta mucho. Besos Kenit
Y a veces, para llevarte la contraria, se estrella contra la chapa... ;-)
ResponderEliminarMuaksss!!!
Y en esos casos, la escandalera es de ordago. Muackssss!!
ResponderEliminarUna pelota como la de la foto la tenía yo pequeño, y le sacaba mucho provecho. Me ha hecho gracia la foto.
ResponderEliminarLo de estrellarse en el fronton más de una vez, es ley de vida, y cosa de los reflejos condicionados, que al final no nos enseñan nada, y es que no aprendemos nunca. Abrazo y chucho.
Por si acaso, no vayas a pensar en otra cosa, por la parte occidental de Asturias:
ResponderEliminarchucho= beso pequeñito.
Es cierto, no aprendemos nunca y la pared es demasiado dura. Al nacer deberían colocarnos esas alarmas que ahora llevan los coches para que cuando aparcas no te lleves los obstáculos por delante.
ResponderEliminarLo del chucho lo había entendido. En mi tierra un "chucho" es un dulce, consistente en un cono de pasta relleno de crema y bañado por encima de azucar. No es un beso pero también reconforta mucho.
Besos Kenit
Te copio la imagen y alguna idea que vienen al caso de la Pelota.
ResponderEliminarSaludos y apertas, que se dice a unos 600 km de aquí
http://pelota-fronton.blogspot.com.es/
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