Busqué en el mapa un punto lejano y allí me fui. Sin apenas equipaje, yo y mi compañía. No he visto salir el sol en los últimos días, ni he conseguido calentar las manos desde que llegué. Un reguero helado que recorre la pared como una herida que no cura, me recuerda lo que me trajo aquí. Miro las yemas de mis dedos, empiezan a abrirse de nuevo. Me fui porque se fue. Escribo la última nota y la quemo con una candela. Las confesiones a destiempo no sirven de nada. Yo lo sé, con eso me basta. Me pregunto en qué momento pasó y en el por qué. A veces olvido que los restos de los naufragios se mueven a la deriva, golpeándose entre ellos, sin un rumbo preciso. Volverá, el mar siempre devuelve los restos perdidos. Mientras, seguiré en la penumbra que busqué en un lugar que se encuentra más allá del que el dedo índice señaló. Me instalé en un modo off.
Hoy vivo en un estado mental de destierro voluntario.
nick cave -
Debes volver y tomar un caldo. Es lo mejor.Aquí también pela el frío.
ResponderEliminarKenit
Y pese a escribir desde Groenlandia, me transmites calidez.
ResponderEliminar:-)